Cada dólar gastado en la educación para las niñas puede generar un retorno de 2,80 dólares, lo que equivale a miles de millones de dólares en PIB adicional; y cada dólar invertido en agua y saneamiento ahorra 4,30 dólares en costos de atención médica.
No es magia y las matemáticas no entienden ni de género ni de obras hidráulicas. Son estadísticas. Las mismas que deberían dictar el sentido común que dice que ayudando a los países con menos medios estamos ayudándonos a todos, incluidos a los que más tienen.
Los ejemplos son numerosos: con cada dólar por persona y año en la lucha contra las enfermedades no transmisibles, se pueden evitar cerca de siete millones de muertes de aquí a 2030 y con cada dólar invertido en prevenir los efectos de los desastres se ahorra hasta 15 dólares en la recuperación de los daños.
Pese a la evidencia y el sentido común, muchos prefieren ver la ayuda al desarrollo como un acto caritativo, en el mejor de los casos, y otros como un abuso de aprovechados, en el peor.
Pero cómo dice el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo en este reportaje sobre mujeres afganas empresarias, ellas no piden beneficencia, sino una oportunidad justa para salir adelante. Tener sus propios ingresos les permite no depender de nadie ni tener que pedir nada.
Contra todo pronóstico, esas mujeres están generando ingresos, empleo y construyendo vidas más plenas y enriquecedoras.
Ampliar el acceso a la financiación pública o privada a esas y otras mujeres y hombres en el mundo, garantizar préstamos, ofrecer condiciones preferenciales en los mercados internacionales y fortalecer las redes de apoyo puede acompañar el crecimiento de las empresas y construir un futuro más próspero ya sea en Afganistán o en Ecuador.
Conferencia a contracorriente
La Cuarta Conferencia de las Naciones Unidas para la Financiación al Desarrollo, que se celebra en la ciudad española de Sevilla del 29 de junio al 3 de julio, no puede tener menos atractivo mediático ni un acrónimo más feo. FFD4 recuerda más a una caza de guerra que a una reunión basada en la solidaridad internacional.
Además, se celebra a contracorriente. Justo cuando muchos países, con Estados Unidos a la cabeza, están retirando o reduciendo esa ayuda. Aunque no todos y hay notables excepciones, como la del país anfitrión de la Conferencia, España, que la ha aumentado en un 12% en sus partidas presupuestarias.
Pero la realidad de la insuficiente ayuda está presente, hasta el punto de que el mismo Secretario General ha afirmado que “la colaboración global está siendo activamente cuestionada”.
Ese cuestionamiento se refleja en el déficit de cuatro billones de dólares anuales que se registra en la financiación al desarrollo, el abandono de los compromisos y la entrega de ayuda por parte de los donantes “a una velocidad y escala históricas”, en palabras de António Guterres, y en el hecho de que los Objetivos de Desarrollo Sostenible, firmados por todos los líderes mundiales hace apenas 10 años, están muy lejos de conseguirse.
Y, sin embargo, hablando de plata esta Cumbre no deja de ser la madre de muchas otras cumbres y muchas soluciones a los problemas por los que el mundo está atravesando.
¿Qué está en juego en Sevilla?
Uno de los requisitos políticos para el éxito de la Conferencia “requerirá que otros países llenen el vacío de liderazgo mundial y demuestren un compromiso creíble con la cooperación multilateral, esencial para nuestra supervivencia”, como asegura Jayati Ghosh, profesora de economía en la Universidad de Massachusetts Amherst.
Para ello, es necesario la reforma de un sistema financiero internacional que no satisface las necesidades de los países en desarrollo, mientras preserva a ultranza los intereses de los desarrollados.
Como muestra un botón: Los países en desarrollo pagan tasas de interés que son al menos dos veces más altas que las de los países desarrollados y los tipos de interés medios que cobran los acreedores privados a los países en desarrollo se encuentran en su nivel más alto en 15 años.
Lo que la ayuda da, la deuda se lo lleva
Los países en desarrollo gastaron una cifra récord de 1,4 billones de dólares en el servicio de la deuda externa en 2023, el máximo de los últimos 20 años. Mientras, en 2024, más de 1100 millones de personas vivían en países en desarrollo donde el servicio de la deuda externa representa más del 20% de los ingresos de las administraciones públicas; y cerca de 2200 millones viven en países en desarrollo donde el porcentaje es superior a 10.
El pago de los intereses de esa deuda frena el desarrollo impidiendo la inversión en infraestructuras de salud y los servicios de educación, por poner dos ejemplos.
La restructuración de la deuda es, por tanto, esencial, porque en el toma de la ayuda y el daca de la deuda se pierde gran parte de las ilusiones de desarrollo.
Impulsar la inversión en lo que se sabe que funciona
Erradicar el hambre en el mundo, achicar las diferencias de género, proteger el medio ambiente, blindarnos contra el cambio climático, salvar los océanos, son necesidades que no forman parte de una agenda extremista como algunos grupos altamente ideologizados califican los Objetivos de Desarrollo Sostenible, sino un mínimo común denominador que los seres humanos exigen y los líderes de 193 países se pusieron de acuerdo en abordar en 2015.
A pesar del ruido que hacen quienes están en contra de la ayuda al desarrollo y el multilateralismo, son una minoría, afirma la Secretaria de Estado para la Cooperación Internacional de España.
En ese sentido, Ana Granados Galindo ve Sevilla como “un punto de luz para la solidaridad global”.
Mientras tanto, las matemáticas, las estadísticas y las mujeres afganas siguen haciendo la magia del desarrollo.
Source of original article: United Nations (news.un.org). Photo credit: UN. The content of this article does not necessarily reflect the views or opinion of Global Diaspora News (www.globaldiasporanews.net).
To submit your press release: (https://www.globaldiasporanews.com/pr).
To advertise on Global Diaspora News: (www.globaldiasporanews.com/ads).
Sign up to Global Diaspora News newsletter (https://www.globaldiasporanews.com/newsletter/) to start receiving updates and opportunities directly in your email inbox for free.